El pasado miércoles 18, en el Club Alma, tuvimos la oportunidad de reunirnos nuevamente en una reunión de WOB. Una tarde en la que mujeres excepcionales se unieron para compartir ideas, reflexionar y, lo más importante, apoyarse mutuamente. Quiero expresar mi agradecimiento a cada una de las participantes por su tiempo, sus aportaciones y, sobre todo, por su disposición a construir un espacio donde el liderazgo femenino cobra un nuevo significado.
A menudo, hablamos de liderazgo desde la óptica tradicional, asociándolo a la capacidad de dirigir, tomar decisiones estratégicas o manejar equipos. Y aunque todas las mujeres que me acompañaron son líderes brillantes y con éxito profesional, en WOB exploramos el liderazgo desde otra perspectiva: la de inspirar, la de ser esa persona que, con su ejemplo y experiencia, allana el camino para que otros también puedan avanzar.
Crear estos entornos de confianza y apoyo es decisivo para alcanzar metas profesionales y enfrentar los desafíos personales que encontramos a diario.
Especial agradecimiento a la participación de Patricia Gabaldón, que nos brindó una visión actualizada de los datos relativos a las leyes de paridad en otras regiones, invitándonos a un debate sobre nuestra propia realidad. El intercambio de opiniones y experiencias siempre es enriquecedor, porque como quedó claro, hay mucho que podemos aprender unas de otras, y ese aprendizaje compartido es esencial para seguir creciendo.
No podemos obviar la realidad de las mujeres en puestos directivos, tanto en España como en el resto del mundo. Y aunque se han logrado avances significativos, el camino hacia una verdadera equidad sigue siendo complejo.
Las estadísticas muestran que aún son pocas las mujeres que llegan a ocupar los cargos más altos, y las barreras, tanto visibles como invisibles, personales o culturales, dificultan a veces ese ascenso. Sin embargo, cuando nos reunimos en espacios como el que creamos en WOB, queda claro que las posibilidades son infinitas.
En estos encuentros compartimos nuestros caminos y nos recordamos que nuestro crecimiento no debe ser solo profesional, sino también personal. Y este apoyo es el que nos impulsa a ser mejores en lo que hacemos.
Gracias nuevamente a todas.
